“Jesús les preguntó: «Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo? Pedro contestó: «Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo.” (Mateo 16,15-16).

Mi hermano y mi hermana, hoy, conmemoramos San Juan María Vianney, un santo francês, un santo que dió su vida por amor a Nuestro Señor Jesucristo, un santo que es patrono de los párrocos, patrono también de los sacerdotes. Un santo que consumió su vida, que entrego su vida en el confessionario, en la enseñanza, en el catecismo. Un hombre, de hecho, de Dios, un hombre super penitente.

Y, hoy, el Evangelio que nosotros escuchamos, esta pasaje que escuchamos, habla de la respuesta de Pedro delante de la pregunta de Jesús: “¿Qué dicen? ¿Qué habla la multitud sobre mí?”. “¿Ah, es un gran profeta? ¿Es Elias? ¿Es Juan Bautista?”. “Pero y para ustedes? ¿Quien soy yo?”. Y Pedro dio esta respuesta: “Tu eres el Mesias. Y Jesús se alegro con la respuesta de Pedro, porque Pedro respondió no segundo la carne, no en una visión superficial, pero en una visión espiritual, y una visión más profunda, porque Pedro hizo una experiencia de amor con nuestro Señor, y puede dar una respuesta correcta.

Por supuesto que, en el Evangelio, nosotros vamos escuchar que Pedro también se equivoco diciendo para Jesús que Él no debería sufrir y todo más. Jesús también reprendió a él.

Decir que el Señor es el Mesias es decir que Él es el Salvador y que nuestra fe esta en Él

Y, mis hermanos, nosotros también pasamos por eso, tenemos altos y bajos en nuestro camino espiritual, nosotros tenemos altos y bajos en nuestra salud, ¿no es verdad? En nuestra salud física. Pero Pedro puede dar una respuesta en Dios, “Tu eres el Mesias. Tu eres el Cristo. Tu eres el Señor”. “El Señor no es solo un milagrero, solo un gran predicador, el Señor es Dios en otras Palabras”, fue la respuesta de Pedro.

Mis hermanos, y debido esta respuesta de Pedro, Jesús confio a él la Iglesia. Los apóstoles deben cuidar de la Iglesia, deben ocuparse por la Iglesia, deben ser fieles al Evangelio y anunciar. Y así, cada apóstol hizo, el Papa también hace y confia en los sacerdotes para que anuncien y prediquen también el Evangelio.

En este día de San Juan María Vianney, recemos por los sacerdotes, para que ellos puedan dar una respuesta también de fe, creyendo en Jesús y anunciando Jesús. La respuesta que Pedro dió, la respuesta que San Juan María Vianney dió, es una respuesta que necesito dar y que tu necesitas dar.

Que nuestros sacerdotes sean fieles, sean coherentes en anunciar el Evangelio, en vivir el Evangelio, y que tu también sea fiel. Seamos fieles al anuncio de la palabra, seamos fieles a esta respuesta, “Tu eres el Mesias”. Y decir que el Señor es el Mesias, es decir que Él es el Señor, que Él es el Salvador, y que nuestra fe esta en Él. Que nuestra fe este en el Señor, y vamos dar nuestra respuesta con nuestra vida, amándonos unos a los otros.

La bendición de Dios Todopoderoso. Padre, Hijo y Espíritu Santo.

¡Amén!