“Jesús anunciaba la Palabra usando muchas parábolas como estas, conforme podían comprender. Y solo les hablaba por medio de parábolas, pero, cuando estaba a solas con los discípulos, les explicaba todo” (Marcos 4,26-34).

Jóvenes: Existe una vida que no termina

Amados hermanos y hermanas, hoy, día de un santo tan querido por Canción Nueva, Don Bosco. Don Bosco, que realizó plenamente la voluntad de Dios. Desde pequeño oyó el llamado de Dios, desde pequeño quiso conocer la voluntad de Dios y por eso se convirtió en un gran santo. Porque en ningún momento de su vida dejó de lado la voluntad de Dios.

Y es considerado el patrono de los jóvenes.

San Juan Bosco se dedicó a ellos de forma singular y extraordinaria a lo largo de su vida. Y el Padre Jonas, de alguna forma, recibió de Don Afonso de Miranda esta misma incumbencia: comience por los jóvenes, porque con los jóvenes es más fácil.

Pero ustedes pueden estar diciendo: “yo ya tengo cierta edad”. Pero pueden ser jóvenes de espíritu.

¿Y qué significa ser joven de espíritu? No dejar que la gracia de Dios envejezca dentro de ti.

Eso era lo que San Juan Bosco intentaba poner en el corazón de aquellos jóvenes: el deseo de vivir esa juventud hasta el final de la vida.

Y solo Dios puede realizar en nosotros esta gracia. Solo Dios puede hacer que no envejezca en nosotros aquello que es don de Dios.

San Juan Bosco habla de la belleza, de la virtud y de la felicidad de estar en la presencia de Dios. Tenemos al joven, al niño que Don Bosco enseñó, Santo Domingo Savio, que decía: “¡Antes morir que pecar!”.

La santidad es justamente eso, es no pecar, es no vivir lejos de la gracia de Dios.

Y Don Bosco lo hizo con mucha maestría y con mucha sabiduría; fue enseñando a sus jóvenes a no vivir una vida de pecado, sino una vida de santidad.

El Padre Jonas también, cuando está con sus jóvenes, cuando hace el llamado a vivir en comunidad, ¿qué nos pide? Renuncia a ti mismo, renuncia a tu familia, renuncia a tus amigos, renuncia a tu noviazgo y ven a vivir en comunidad, es decir, ven a vivir una vida de santidad, una vida que nos llevará a una vida lejos del pecado.

Que San Juan Bosco interceda por nosotros, interceda para que tengamos un espíritu joven para hacer la voluntad de Dios.

Sobre todos ustedes, venga la bendición del Todopoderoso. Padre, Hijo y Espíritu Santo.

¡Amén!