27 Apr 2020

Trabajemos con el ardor para lograr la vida eterna

“Trabajen, no por el alimento perecedero, sino por el que permanece hasta la Vida eterna, el que les dará el Hijo del hombre; porque es él a quien Dios, el Padre, marcó con su sello” (Jn 6, 27)

Necesitamos trabajar para tener el pan de cada día, necesitamos de nuestro trabajo, y no podemos negar eso a nadie, aún que tengamos que hacer esfuerzos, como estamos haciendo. Todos nosotros, en el mundo entero, tenemos de prevenirnos de un mal mayor, pero de nuestra forma, obedeciendo las leyes civiles, uniéndonos alrededor de un ideal mayor, cuidando de nuestra salud, hasta para que podamos trabajar después, porque sin salud nadie va trabajar, nadie tendrá su sustento de cada día.

No tengamos miedo que es preventivo. Además, el miedo y la inquietudes están en nosotros, porque nuestro esfuerzo es siempre por el alimento material, por el alimento que nos llevar a perecer.

El pan del cual nos alimentamos – el arroz, la alubias, nuestra comida de cada día – es para que nuestro físico se sustente. No seamos mundanos, no tengamos aquella mentalidad mundana de creer que necesitamos alimentarnos solo del alimento cotidiano y ordinario.

Necesitamos trabajar con más ardor por el alimento que permanece incluso la vida eterna. El pan que comemos, aquí nos lleva a perecer aquí mismo, pero cuando nos alimentamos de la Palabra de Dios y de Jesús, cuando alimentamos nuestra vida espiritual, estamos sembrando la eternidad en nosotros.

Aquel que inviste tu vida en Dios permanece incluso la vida eterna

Los hombres están buscando formulas para que la vida aquí se multiplique, dure más; y algunos quieren ser incluso eternos aquí, pero no van, porque la vida es perecedero. Eso es del propio organismo humano, que se va deshaciendo, va encontrando su contingencia con el pasar del tiempo.

Podemos cuidar bien de nuestra salud, pero no podemos negar que pereceremos. Aquel que se alimenta del alimento eterno, que se alimenta para la eternidad ni se preocupa con esta vida que viene y que va, porque él inviste tu vida en la eternidad.

Por supuesto que quien solo mira la vida del punto de vista material sufre y perece con más facilidad, porque Aquel que nos dio la vida material también la lleva de vuelta, pero aquel que inviste tu vida en Dios permanece incluso la vida eterna.

Y es Jesús y en la vida eterna que queremos investir nuestra vida y cuidar de nuestro espíritu. Hagamos eso en el tiempo que tenemos y incluso en el tiempo que, muchas veces, no tenemos. No nos dediquemos solo para trabajar y tener, porque llega un tiempo que no vamos tener nada, y solo la vida en Dios va ser suficiente para permanecer eternamente.

¡Dios te bendiga!

Pai das Misericórdias

Pedido de Oración

Enviar
  • Aplicativo Liturgia Diária

    Com o aplicativo Liturgia Diária – Canção Nova, você confere as leituras bíblicas diárias e uma reflexão do Evangelho em texto e áudio. E mais: você ainda pode agendar um horário para estudar a palavra por meio do aplicativo.