29 May 2022

Sienta la presencia de Dios tocar tu corazón

“Jesús los llevó hasta cerca de Betania y, levantando las manos, los bendijo. Y mientras los bendecía, se separó de ellos y fue llevado al cielo. Ellos se postraron ante él. Después volvieron llenos de gozo a Jerusalén, y continuamente estaban en el Templo alabando a Dios” (Lc 24, 50-53).

Mis hermanos y hermanas, hoy es domingo y estamos con toda la Iglesia celebrando la Solemnidad de la Ascensión del Señor. La ascensión, en realidad, es una forma de educar al discípulo. Es así: la educación que nosotros recibimos del Señor, en nuestro discipulado, pasa por esta etapa.

Miren ustedes, el padre y la madre que educan el hijo y hacen de él una persona autónoma; la profesora que educa su alumno y lo ayuda a ir hacia adelante en las etapas de formación intelectual; un formador, por ejemplo, que educa su formando y no se apega a él, también lo ayuda a convertirse autónomo e independiente, protagonista de tu propia formación, de tu camino formativo. Y Jesús hace lo mismo con Sus discípulo, con cada uno de nosotros.

La educación que pasa por una partida, que pasa por una separación, la educación que pasa por esta etapa, aparentemente, dolorosa, pero extremamente instrumento de madurez para la vida del discípulo.

La presencia ahora no sera más del lado, pero la presencia va ser dentro. El discípulo va tener que aprender a tener la presencia de Su Maestro dentro del corazón, dentro de sí.

La presencia de Jesús va ser en el alma, en el corazón, ella necesita ser sentida dentro

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Aquí podemos ver esta pasaje, este cambio en el comportamiento de Jesús para con Sus discípulos. Cuando Jesús estaba presente al lado de Sus discípulos – decir al lado era una presencia marcada por la realidad física – , Jesús estaba allí, ellos podían tocar en Él, estar con Él, escuchar Su voz, ver su rostro, una presencia marcada por el sentimentalismo, por las instrucciones, el convivio, el consuelo, de Jesús, la ayuda, pero en una forma horizontal. Esta era la presencia de Jesús al lado, ahora, Él esta dentro.

¿Cuáles son las modalidades de esta presencia dentro? Ahora, la presencia de Jesús va ser en el alma, en el corazón, ella necesita ser sentida dentro, en el interior del discípulo, basada en las convicciones, en las seguridades, en las promesas que Jesús hizo. Y vamos recordar eso, vamos hacer memoria de aquello que Jesús nos dijo basada en la confianza de que Él esta con nosotros todos los días, en la memoria diaria de todo que nosotros vivimos con el Señor. Esta es la fase que el Señor quiere ponernos, ahora, con la Solemnidad de la Ascensión, una nueva modalidad de la presencia.

Por eso, esta experiencia de amor que educa, ayuda el otro a convertirse protagonista de la propia vida, autónomo, capaz de florecer tus dones, capaz de florecer tus talentos, de poner para fuera tu mejor y dar al mundo tu mejor.

La Solemnidad de la Ascención del Señor no es una solemnidad de la ausencia, no es la fiesta de la ausencia, pero de un paso atrás que el Señor da, pues, es necesario que ocurra Pentecostés. Jesús sale de escena para que ocurra Pentecostés. Entonces, no es su ausencia, es solo un paso atrás estratégico, para que el discípulo también reciba ahora, del Alto, una nueva modalidad de la presencia y sepa amar a Jesús y a vivir con Él aqui dentro del corazón. Aún cuando los sentimientos decir al contrario, el discípulo sepa que el Maestro esta con Él, esta cerca.

Sobre Todo vosotros, la bendición de Dios Todopoderoso. Padre, Hijo y Espíritu Santo.

¡Amén!

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