“Pero no será así entre ustedes. Por el contrario, el que quiera ser el más importante entre ustedes, debe hacerse el servidor de todos” (Mc 10, 43).
¡Como necesitamos aprender con Jesús cual es el significado de servir, cual es el significado de trabajar para los demás, cual es la verdadera grandeza de la vida! Porque Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, fueron movidos por un sentimiento de grandeza, se sentirán grandes e importantes, fueron pedir a Jesús para uno sentarse a la derecha y el otro a la izquierda.
Nos gusta reconocimientos, aplausos, de los merecimientos; y el peor es que nos envanecemos cuando sobresalimos sobre los demás.
Los demás discípulos quedaran angustiados e incluso con rabia de los dos hermanos, porque estaban todos en el mismo barco y fueron pedir para ser mejores que los demás. El Maestro no se dejo llevar por la discusión, tranquilizo el corazón y explico cual era el sentido verdadero de la misión, en lo que consiste seguir a Él y en lo que consiste servir.
En el mundo, los grandes, los jefes, ellos oprimen, tiranizan y se ponen por encima de los demás, pero entre nosotros jamás debe ser así. Entre nosotros hay aquel que es llamado para una función que exige más responsabilidad, porque entre nosotros debe tener aquel que es el padre, aquel que es la madre, aquel que es el jefe, aquel que es el líder,
Necesitamos aprender con Jesús cual es el significado de servir, cual es el significado de trabajar para los demás
¿Qué es líder para Jesús? Es el servidor, es aquel que esta haciendo el trabajo de lavar los pies de sus hermanos. No podemos tener en la Iglesia, entre nosotros, la mentalidad mundana, porque existen los grandes y los importantes en el mundo.
El mundo sigue su mentalidad, pero aquellos que son discípulos de Jesús no. Quien siente un llamado para liderar necesita aprender que ser líder es servir. Quien siente un llamado de estar delante necesita saber que esta delante para cuidar bien de los demás.
¡Como el mundo de hoy falta verdaderos siervos, de verdaderos servidores, de personas que, realmente, se ponen a disposición para ser esclavos de todos! Jesús es esclavo, pero no es esclavo de sumisión. Es el esclavo de servir hermanos, de lavar los pies y cuidar de ellos.
¡Las personas necesitan más de cuidados que de personas que mandan, porque para mandar es lo que más tiene! Todo mundo quiere mandar; ahora, cuidar es solo para quien tiene el corazón como lo de Jesús: manso, humilde y servidor.
Pidamos a Dios la gracia de servir unos a los otros.
¡Dios te bendiga!