“«¿Con quién puedo comparar a los hombres de esta generación? ¿A quién se parecen? Se parecen a esos muchachos que están sentados en la plaza y se dicen entre ellos:”¡Les tocamos la flauta, y ustedes no bailaron! ¡Entonamos cantos fúnebres, y no lloraron!”(Lc 7, 31-32).
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Mis hermano y mis hermanas, la vida nos presenta, todos los, algunas elecciones. Es necesario tomar algunas decisiones, y algunas decisiones no pueden ser prorrogadas, necesitan ser tomadas con rapidez, hoy. Del contrario, nosotros pasaremos toda la vida, como nos habla, “por encima del muro”; y, peor, viviremos en cima del muro opinando sobre la vida de los demás y nunca confrontaremos nuestros propios comportamientos.
Los ejemplos que Jesús presenta aquí – el padre no ha leído el restante del Evangelio, pero Jesús presenta Juan Bautista y presenta Su propia vida.
Juan Bautista adopta un estilo de vida acético, es decir, muy riguroso en la oración, en el ayuno y en la penitencia; un hombre que bautiza, que difunde la conversión, que usa ropas de expresión de la pobreza, que no come pan ni bebe vino. A este dicen que existe un demonio y que él no está bien de la cabeza.
Ahora, Jesús, que come y bebe, le gusta estar en la casa de las personas, de hacer amigos, de mezclarse con las personas de su tiempo (hasta aquellas personas que no eran bien vista), a este llaman de pajita, comelón y amigo de los pecadores.
Quien esta en Dios se esfuerza evangelizando y llevando la Palabra de Él a muchos corazones
Quien no quiere cambiar de vida encontrara siempre, en la vida de alguien, una culpa para permanecer en el muro de la indecisión y del comodismo. Es la decisión sobre nuestra vida que nosotros necesitamos decidir.
No miremos para la vida del vecino, no miremos para la vida del otro, pero miremos para nuestra propia vida y tomemos consciencia que necesita ser cambiado en nosotros, de lo que necesita ser cambiado en nuestro camino.
Ahora, quien ha decidido vivir su vida pautada en Dios no pierde tiempo con polémicas, con discusiones y criticas. Quien esta en Dios se esfuerza evangelizando y llevando la Palabra de Él a muchos corazones.
Sabemos que, en los tiempo de hoy, hay mucha gente creando división dentro de la Iglesia de Cristo, y aún tiene el coraje de llamar eso de “apostolado de la fe”. ¡Que tengas mucho cuidado! No pierdan tiempo con las cosas inútiles, pero esforcemos anunciado Jesucristo, predicando la segunda venida del Señor, anunciando que la santidad se hace necesaria. ¡Que el Señor nos ayude!
Sobre todos ustedes, venga la bendición del Todopoderoso. Padre, Hijo y Espíritu Santo.
¡Amén!