Jesús viene con el Padre y el Espíritu hacer en nosotros lugar de la morada de Dios
“El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en él” (Jn 14, 23).
¡Que declaración de amor maravillosa! Jesús esta diciendo que Él y el Padre hacen morada en nosotros si lo amamos. No es un “amor sentimiento” o un “amor palabra”, porque la afirmación de Él es muy clara: “El que me ama será fiel a mi palabra”. Queremos que Dios haga Su morada en nosotros.
Vamos a la iglesia, al templo, porque sabemos que allá es la morada de Dios. Entramos en una iglesia para encontrarnos con Él. Nos alimentamos de Jesús vivo en la Eucaristía, por lo tanto, nos alimentamos de la Palabra de Dios.
La Palabra quiere entrar y permanecer en nosotros. Así como el Señor esta en la iglesia, Él quiere permanecer en nosotros, vivir en nosotros. Guardemos Sus Palabras, Sus mandamientos, hagamos de nuestro corazón lugar de la morada de Dios.
Estamos dejando muchas cosas morar dentro de nosotros, estamos guardando tantas cosas viejas, y muchas veces, prefiriendo aquello que nos destruye, que nos deja amargos y nos engaña, esté creciendo dentro de nosotros.
Diga “no” a los malos pensamientos, a los resentimientos, y a las cosas viejas que están hace tiempo removiendo dentro de nosotros. Que la Palabra permanezca en nosotros, viva en nosotros, porque es guardando esa Palabra que Jesús viene con el Padre y el Espíritu para vivir en nosotros y hacer en nosotros lugar de la morada de Dios.
¡Dios te bendiga!
