“Ama a tus enemigos y hace el bien a los que usted odea, bendice a los que maldicen y ora por los que te calumnian” (Lucas 6,27)
Jesús está hoy, en su pregación, diciendo a aquellos que lo escuchan, a los discípulos y a cada uno de nosotros, que necesitamos aprender y dar otra face. Dar la otra, en la verdad, y dar lo mejor de nosotros, para que el peor que viene del otro no quede en nosotros, para que lo que viene de negativo del otro y no pare en nosotros.
Si alguien da una ofensa, no necesito comprar la ofensa de él, yo tengo algo mejor para dar a el do que la ofensa. Tengo amor, perdón, misericordia y gracia divina, imagino que eso sea mejor que lo que hay en mi. El amor de Dios en mi es lo mejor que puedo tener adentro, pero si yo no lo tengo, necesito tener.
Si el otro viene con odio y yo respondo con odio, imagina que señuelo no queda esta vida, que tragédia no queda, qué sentimiento, que venganza va alimentando, acumulando, formando, y crecen en todas estas situaciones duras y crueles de la vida humana: las rivalidades, peleas, confusiones, divisiones y separaciones.
Falta el evangelio. Usted puede saber que donde hubo pelea, ofensa, faltó alguien fermentando al evangelio. Entre dos personas ofendidas, solo puede crecer la ofensa, entre dos personas resentidas y dolorosas, solo puede crecer el odio, rencor y los sentimientos negativos. Basta, por supuesto, una solo tener el amor del evangelio para expulsar aquello de peor que el otro pueda hacer.
Usted tendrá siempre salud, bendición y protección cuando dar de Dios y el amor de Él aquéllos que no retribuyen de la misma manera
La receta de la vida es esa: amar quien no nos quiere bien, hacer el bien a quien hace el mal, orar y bendecir aquellos que maldicen, y rezar por quien es deshonesto, quien calumnia y habla mal de nosotros.
Si alguna persona habla mal de usted, bendice el evangelicamente, para que el mal de él no quede dentro de usted, no se ponga rancio, esa cosa negativa, y puede erosionar su salud mental, emocional y espiritual. De a é aquello que usted tiene. Si usted tiene Dios, de Dios a él, si usted tiene amor, de amor a él, si usted tiene perdón, perdón, pero si te falta alguna de estas cosas, busca la verdad.
Tengo la certeza que usted tendrá salud, bendición y protección de Dios cuando dar Dios y el amor de Él a aquellos que no le dan de la misma forma.
Dios te bendiga