“Los zorros tienen cuevas y las aves tienen nidos, pero el Hijo del Hombre ni siquiera tiene dónde recostar la cabeza” (Mt 8, 20).
Mira que es un maestro de la Ley, un hombre conocedor de la Ley que se acerca de Jesús y dijo: “Maestro, yo te seguiré adonde quieres que tu vayas”.
Jesús no ilude nadie, Él no engaña nadie. “Tu quieres seguirme, yo te doy la seguridad de la vida eterna, pero no te doy la seguridad materia ni afectiva que tu quieres y tanto anhelas”. Las aves del cielo tiene sus nidos, los zorros tiene sus abrigos; pero el Hijo de Hombre no tiene donde reclinar su cabeza. El Hijo del Hombre no se apega a nada, no tiene nada, vive despojado.
Seguir Jesús es, muchas veces, vivir en la inseguridad del mundo en que estamos. “¿Dios Mio por que estoy pasando por eso?”, “Por que estoy pasando por esta probación de no tener las cosas?”. ¡De ninguna forma, no se iluda!
Seguir Jesús es tener momentos donde vamos tener en abundancia, pero en momentos no vamos tener nada
Necesitamos trabajar para conseguir nuestro pan de cada día, pero no espere de Dios la estabilidad material. Porque, en realidad, todo en este mundo es temporal, y so nos apegamos a las osas temporales, no conseguimos prendernos al esencial no conseguimos tener la dinámica el gusto y el sabor por las cosas de Cielo.
Si vivimos presos y si nuestra vida son ventajas materiales, no conseguimos seguir Jesús, porque nadie tiene en este mundo estabilidad material como quiere tener. Tu terminas de hacer una casa que costo casi una vida todo, ahora el próximo es vivir reparando, arreglando, reformando .. Por fin lo que es propia de la vida.
Seguir Jesús es trabajar para tener la vida digna de cada día; con seguridad no tenga duda sobre eso, pero no espere tener la seguridad que siempre queremos y buscamos tener.
Seguir Jesús es seguir en la sombra y en el calor, es seguir en la lluvia y en el sol. Seguir Jesús es tener momentos donde vamos tener en abundancia, pero en momentos no vamos tener nada. Como nos habla San Pablo: “Yo sé vivir tanto en las privaciones como en la abundancia; estoy hecho absolutamente a todo, a la saciedad como al hambre, a tener sobra como a no tener nada.” (Filipenses 4, 12).
Ahora si tu piensas que seguir Jesus es siempre tener, es tener aquella estabilidad, es tener prosperidad material, esta teniendo un engaño, porque Él propio no tuvo ninguna estabilidad material y ninguna prosperidad, como muchos quieren predicar.
“Jesús, yo voy seguirte, pero primero deja enterrar mi padre”. Es decir, queremos en este mundo pensar que el padre y madre no van morir. Vamos esperar eso ocurrir, pero, a veces, vaps incluso primero que el padre y madre.
No es esta lógica de la vida, pero resumiendo, sigue Jesús con su padre y con su madre, sigue Jesús en lo que estas haciendo, trabajando, donándose para el reino de Dios. No espere la vida estar estabilidad o no esperes que todo efectivamente este resuelto. Seguimos Jesus de la forma ue estamos, de la forma que somos. Seguimos Jesús con nuestra pobreza y riqueza, pero hacemos de Él nuestra única riqueza. Seguimos Jesús amando los nuestros, pero haciendo de Él el primer amor de nuestra vida
¡Dios te bendiga!