29 Mar 2018

Debemos lavar los pies unos de los otros

La Eucaristía no es solo comulgar del Cuerpo y Sangre del Señor, ella comienza en el suelo, cuando lavamos los pies unos de los otros

“Si yo, que soy el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros. Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes” (Jn 13, 14-15).

Comenzamos, hoy, el Triduo Pascual de Nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Después de cuarenta días de nuestros ejercicios Cuaresmales, entramos en la Pascua de Nuestro Señor y Salvador para celebrar con la vida de Él la transformación que Él realiza en la vida de cada uno de nosotros.

Cristo es el siervo sufridor que será glorificado. Contemplamos el Cristo siervo, que sirve a la humanidad. Toda la vida de Cristo fue un servicio por la salvación de cada uno de nosotros. Él no mostró para nosotros como el Señor, como aquel que esta encima de todos, Él mostró que: ser Señor es, por encima de todo, ser servidor.

En Su ultima Cena, Él no estaba allí para ser exaltado y ni glorificado; Él mismo tomó la actitud de hacer lo que un esclavo hacía, lavó y secar los pies de Sus discípulos. (Juan 13,12-15) Debemos lavar los pies unos de los otros.

La Eucaristía no es solo comulgar del Cuerpo y Sangre del Señor, ella comienza en el suelo, cuando lavamos los pies unos de los otros. Para celebrarnos la Eucaristía necesitamos purificarnos de aquel viejo fermento de la soberbia, del egoísmo que nos pone por encima de los demás, que nos hace sentir mejores que los demás, aquel orgullo que nos lleva a competir, a ponernos encima d ellos hermanos; aquel orgullo que hace de nosotros “señores” del conocimiento, del saber, de la discusión.

No necesitamos de peleas, de discusiones, no necesitamos de batallas y obstáculos, porque el “servidor” no pelea. Si hay entre nosotros peleas y discusiones, es porque falta en nosotros el verdadero espíritu de Cristo.

El espíritu de Cristo es el espíritu de siervo, es aquel que lava los pies unos de los otros. No es teatro, por el contrario, es vida. Si nuestra vida quiere ser transformada, si queremos celebrar la Pascua de Cristo con el fermento nuevo, nos purifiquemos de esta arrogancia de sentirnos mejores, dueños de la razón y de la verdad.

Aprendamos que solo existe una cosa importante para seguir y servir a Cristo: ser siervos unos de los otros.

¡Una Pascua bendecida para todos nosotros!

¡Dios te bendiga! 

Pai das Misericórdias

Pedido de Oración

Enviar
  • Aplicativo Liturgia Diária

    Com o aplicativo Liturgia Diária – Canção Nova, você confere as leituras bíblicas diárias e uma reflexão do Evangelho em texto e áudio. E mais: você ainda pode agendar um horário para estudar a palavra por meio do aplicativo.