“Jesús le respondió: «El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en él. El que no me ama no es fiel a mis palabras. La palabra que ustedes oyeron no es mía, sino del Padre que me envió. Yo les digo estas cosas mientras permanezco con ustedes. Pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi Nombre, les enseñará todo y les recordará lo que les he dicho” (Jn 14, 23.25-26).
Mira, mis hermanos y hermanas, estamos caminando en este tiempo Pascual y vamos en la dirección de Pentecostés, en eta gran fiesta, esta gran Solemnidad en la vida de nuestra Iglesia.
La Palabra de Dios de este domingo, presenta el Espíritu Santo como aquel que es capaz de recordar todas las cosas que Jesús dijo. Mira, la atribución que es dada al Espíritu Santo: recordar todas las cosas.
Vamos entender, la palabra “recordar” viene del “color”, que es corazón, entonces, es devolver para el corazón, es decir, recentralizar nuestra vida con las cosas importantes que nos enseño Jesucristo. Entonces, recordar es traer de vuelta para el corazón, es traer de vuelta para el centro, es darse cuenta que nosotros no podemos dejar de determinadas cosas que nos enseño el Señor, porque sin ella nosotros nos perdemos.
Si olvidamos de estas cosas fundamentales, somos capaces de hacer elecciones equivocadas, por eso el Espíritu Santo es el Defensor, aquel colocado a nuestro favor para recordarnos el esencial, sino podemos perder el sentido de vivir, sino podemos perder el sentido de ser cristianos en el mundo, de vivir en la gracia de Dios, de luchar por la santidad. No podemos perder eso, y el Espíritu Santo nos recuerda el esencial, nos hace centralizar de nuevo Jesucristo.
El Espíritu Santo quiere recordarnos que nosotros necesitamos tener Jesucristo como el centro de nuestra vida
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¿Por que vale la pena, todos los días, levantarme y buscar la fidelidad a nuestro Señor? ¿Por que vale la pena ser padre? ¿Por que vale la pena estar casado? ¿Por que vale la pena ser fiel a Jesucristo? Por que vale la pena seguir los mandamientos del Señor? Ese esencial, esta realidad fundamental quien nos recuerda es el Espíritu Santo.
Porque en nuestra vida cristiana, muchas veces, las cosas van siendo olvidadas; Jesús va siendo colocado de lado, Jesús va quedando oculto en nuestra vida y por eso el sentido de elegir por el Señor, muchas veces, puede ser confundido, y ahí todo se convierte confuso en nuestra vida, Aparece el Espíritu Santo para, de nuevo, para recordarnos que necesitamos adherir a Jesucristo con todo nuestro corazón.
El Espíritu Santo nos hace caminar con los pies en el suelo, nos hace caminar en nuestra verdad, sabiendo que todas las cosas que están alrededor de nosotros necesitan ganar, en Cristo, un sentido nuevo.
Tal vez tu estás pasando por esta experiencia hoy, tal vez el Espíritu Santo hoy necesita recordar a tu corazón que Jesucristo esta quedando un poco abandonado en tu vida, Jesucrsito esta perdiendo el lugar para otras cosas, para otras personas. Es el momento de despertar porque el Espíritu Santo quiere recordarnos que nosotros necesitamos tener Jesucristo como el centro de nuestra vida y las cosas esenciales no pueden ser dejadas de lado.
Sobre todos vosotros, la bendición de Dios Todopoderoso. Padre, Hijo y Espíritu Santo.
¡Amén!
