15 Feb 2021

Abramos nuestro corazón para la gracia de Dios

“¿Por qué esta generación pide un signo? Les aseguro que no se le dará ningún signo” (Mc 8, 12).

La hipocresía o la ilusión de la vida es pedir una signo de la gracia cuando nosotros tenemos la gracia. ¿Cuál es la signo que vamos pedir a Dios si Él esta en nuestro medio? ¿Cuál es el signo que vamos pedir para encontrarnos con Él, si Él ya está aquí en nuestro medio? Disculpa, estamos viviendo una religión a ciegas, no vemos lo que es obvio, no vemos la gracia. Pero el problema no es la gracia, es nuestro corazón que no se convierte para ella.

La Palabra de Dios esta allí siendo anunciada y proclamada; la Palabra de Dios esta actuando, esta libertando, esta curando, pero no estamos viendo, porque nuestros ojos están vedado; entonces, no quedemos esperando Dios darnos algun signo, no quedemos esperando caer un trueno del cielo, no quedemos esperando nubes corriendo de un lado para el otro, porque hay mucha gente diciendo: “¡Mira, Dios nos va mandar un signo!”. No necesitamos de signo, ya estamos con la presencia amorosa de Dios en todos los lugares en que vamos.

Jesús es la Palabra viva, Él esta a nuestro lado todos los días, para que de ella nosotros nos alimentemos. Él esta en todos los Sagrarios del mundo entero, vivo y resucitado. Algunas personas necesitan ir en Jerusalén para encontrar Jesús ¡No hay problema! Yo también ya fui allá. Pero Él esta en la capilla en la zona de la mata, Él esta en nuestras ciudades y metrópolis; esta presente, vivo y real en la hostia consagrada, en la Eucaristía.

El problema no es la gracia, es nuestro corazón no convertirse para ella

Hay personas que necesitan ver Dios, pero Él mismo ya dijo: “Ya tuve hambre… Yo estoy allí en el hambriento, en el sediento” (Mateo 25, 35). Pasamos todos los días por Jesús tirado a nuestro lado, pero no conectamos, porque queremos signos para beneficiar nuestra materialidad, nuestras gracias personales que, muchas veces, son materiales, por eso no percibimos toda la manifestación poderosa y amorosa de Dios en nuestro medio.

Yo nunca pedí, ni voy pedir ni quiero que Nuestra Señora y Nuestro Señor aparezcan, porque yo estoy aquí, estoy viendo y contemplando. ¿Si no encuentro Jesús en la Eucaristía, en la Palabra y en el hermano, donde voy encontrarlo?

No pongamos Dios a la prueba, pongamos nuestro corazón de rodillas, pongamos nuestro corazón penitente para abrirse a la gracia, porque ella esta allí, pero estamos dejando pasar, porque no nos convertimos para ella.

¡Dios te bendiga!

Pai das Misericórdias

Pedido de Oración

Enviar
  • Aplicativo Liturgia Diária

    Com o aplicativo Liturgia Diária – Canção Nova, você confere as leituras bíblicas diárias e uma reflexão do Evangelho em texto e áudio. E mais: você ainda pode agendar um horário para estudar a palavra por meio do aplicativo.