27 Aug 2018

La hipocresía es una tentación para nuestra vida

Somos personas religiosas por vocación, por el bautismo, por la gracia de servir a Dios y necesitamos estar siempre vigilantes contra la tentación de la hipocresía.

“«¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que cerráis a los hombres el Reino de los Cielos! Vosotros ciertamente no entráis; y a los que están entrando no les dejáis entrar.”  (Mateo 23, 13-14)

Toda y cualquier hipocresía deber ser condenada y combatida. Jesús no está combatiendo a los hombres, al contrario, Él está combatiendo a la hipocresía reinante en los hombres religiosos de su época. Nosotros que somos personas religiosas por vocación, por el bautismo, por la gracia de servir a Dios, necesitamos estar siempre vigilantes contra la tentación de la hipocresía.

¿Qué es la hipocresía? Sabemos lo que está bien y lo que está mal, tenemos la facilidad de condenar el error y la debilidad de los otros, apuntar quien hizo bien y quien hizo mal y tenemos también una facilidad de absolvernos de nuestros propios errores, hasta tenemos siempre una postura de disculpas hacia nuestras fallas y límites.

No se trata de tener una postura que nos lleva a aceptar todo lo que está mal en el mundo, al contrario, no podemos caer en un modo de vida farisaico, de tener la capacidad de apuntar con el dedo, de ver el error y decir: “Yo no cometo aquello que los demás cometen, pero yo cometo otros errores y pecados”. ¿Qué necesitamos hacer? Necesitamos convertirnos, dejarnos convertir día a día, colocarnos en una actitud de vigilancia y colocar nuestra “barba en remojo” todos los días y jamás levantar el dedo para condenar a otras personas.

No veo al Maestro Jesús condenando ni discriminando a nadie, veo al Maestro Jesús amando a los pecadores, incluso a los que pensaríamos como los peores pecadores de su época, sin embargo, veo también a Jesús condenando cualquier hipocresía. No podemos ser diferentes, tenemos que prestar atención a lo que hacemos, en lo que fallamos, como nos comportamos ante los demás porque la hipocresía va a ser siempre una tentación para nuestra vida.

Los humildes se corrigen y se dejan corregir, los hipócritas y orgullosos se cierran y no son corregidos. ¡Que Dios nos muestre la vía de la humildad que nos santifica siempre!

¡Dios te bendiga!

Pai das Misericórdias

Pedido de Oración

Enviar
  • Aplicativo Liturgia Diária

    Com o aplicativo Liturgia Diária – Canção Nova, você confere as leituras bíblicas diárias e uma reflexão do Evangelho em texto e áudio. E mais: você ainda pode agendar um horário para estudar a palavra por meio do aplicativo.